Degeneración macular: síntomas, causas y tratamiento

Conocida por sus siglas (DMAE) es una enfermedad degenerativa ocular, la cual tiene un tratamiento de mácula específico que debe conocer. Además de ser la causa principal de la ceguera y baja visión en países desarrollados, la DMAE es una enfermedad crónica de origen multifactorial, que afecta la retina, provocando importantes alteraciones visuales aquejando a los adultos en su gran mayoría.

Si bien es cierto que sus síntomas se relacionan con una visión central borrosa o distorsionada está claro a su vez, que los mismos son específicos y casi determinantes lo cual significa que tener un campo visual negro, denominado escotoma, es un indicio de acudir inmediatamente a un centro de cirugía ocular.

Específicamente la degeneración macular afecta una pequeña área dentro de la retina, la cual impide ver detalles con claridad desde la parte central del ojo, lo cual innegablemente crea una sensación de impotencia asociada con una pérdida de la visión que impide desarrollar las actividades de forma tradicional. 

Causas de la degeneración macular

Mucho se ha hablado acerca de aquellos aspectos que pueden causar esta degeneración macular, entre otros, se ha mencionado que la luz ultravioleta y los factores nutricionales son causantes principales de esa mancha negra que afecta la visión de aquel que la padece.

Aunque aún no se tiene claridad si estos aspectos pueden involucrarse o no en la enfermedad, está claro que es el tiempo el factor principal que determina un deterioro progresivo del epitelio pigmentario de la retina, lo cual afecta la agudeza visual en pacientes mayores de 65 años.

Tipos de degeneración macular

• Degeneración macular seca: ocurre cuando los vasos sanguíneos bajo la mácula se vuelven delgados y frágiles, formando pequeños depósitos amarillos, llamados engrosamientos localizados, los cuales hacen necesario una revisión con un profesional visual determinando si es momento de una cirugía Lasik o de párpados.

• Degeneración macular húmeda: en donde se crean nuevos vasos anormales y muy frágiles, denominada también neo vascularización de la coroides, estos vasos dejan escapar sangre y líquido, generando una pérdida de visión asociada con la enfermedad entre otros factores de riesgo que se deben tener en consideración se encuentran: fumar cigarrillo, obesidad, dieta alta en grasas entre otros. El tipo húmedo siempre comienza como el tipo seco.

Síntomas de la degeneración macular

• Húmeda: dentro de los síntomas más comunes se presentan distorsiones visuales, como líneas rectas que parecen curvadas, visión central reducida, disminución de la intensidad o el brillo de los colores, presencia de puntos borrosos o un punto ciego que impide definir el campo de visión. Así mismo, pueden empeorar los síntomas rápidamente.

Cabe resaltar que esta enfermedad de los ojos no afecta la visión lateral (periférica), pero sí puede disminuir la capacidad visual y rara vez causa ceguera total. Es de vital importancia visitar al médico si ha notado cambios en su visión o si su capacidad de percibir los colores y detalles finos se deteriora de forma progresiva. Estos síntomas pueden darse sobre todo si la persona tiene más de 50 años.

• Seca: esta presenta síntomas similares a los de la húmeda, solo que por lo general afecta ambos ojos. La degeneración seca es más frecuente, pero por lo general progresa lentamente (durante años), lo cual hace que pueda tratarse con mayor facilidad y diagnosticar oportunamente. Es más probable que la de tipo húmedo cause un cambio relativamente repentino en la visión lo cual da como resultado una pérdida grave de esta.

Tratamiento recomendado para la degeneración macular

Se debe tener claro que dependiendo la edad y el tipo de degeneración macular se puede intentar restablecer la visión por medio de una combinación de vitaminas, antioxidantes y cinc que pueden evitar el empeoramiento de la enfermedad si la degeneración macular no es grave.

Una cirugía láser que destruye los vasos sanguíneos anormales y permeables será otra alternativa que solucione y pueda mitigar los efectos de ese malestar que produce tener una visión empañada, en este caso se deben descartar entre otros aspectos como miopía, que solo el especialista determinará. La detección y el tratamiento a tiempo de la degeneración macular húmeda puede ayudar a reducir la pérdida de la vista y, en algunos casos, a recuperarla.

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